Ciclo C

Exposición del Santísimo Y Oración

 

Exposición del Santísimo 

En San Pedro Apóstol TODOS LOS JUEVES de 19.30 a 20.30

En Santa María TODOS LOS DOMIGOS de 19.00 a 19.30

En Las Mínimas TODA la mañana de 9.30 a 13.00

 

 

 

 

 

 

SOLEMNIDAD DE LA EPIFANÍA DEL SEÑOR. DÍA DEL CATEQUISTA NATIVO Y DEL IEME. Lunes 6 de enero de 2025

Is 60,1-6: La gloria del Señor amanece sobre ti.

Sal 71: Se postrarán ante Ti, Señor, todos los pueblos de la tierra.

Ef 3,2-3.5-6: Los gentiles son coherederos de la promesa.

Mt 2,1-12: Hemos visto salir su estrella y venimos a adorarlo.

 

Primero fueron los pastores a donde les había indicado un ángel y luego acudieron los Magos de Oriente, por mediación de una estrella. Los primeros estaban cerca y fueron a Belén a todo correr, constatando que lo que el ángel les había anunciado era verdad. Los segundos partieron de muy lejos y tuvieron que recorrer una travesía larga, de semanas o de meses, hasta que se cercioraron de que la estrella ciertamente estaba asociada al nacimiento de un auténtico Rey. Los de lejos y los de cerca coincidieron en el mismo punto y vieron lo mismo, aunque desde procedencias y por caminos diferentes.

               Mientras que los pastores representan al pueblo sencillo, humilde, incluso excluido, como destinatarios privilegiados de que el Hijo de Dios ha nacido también en sencillez y humildad, los Magos de Oriente, son expresión de la humanidad sin tradiciones ni creencias judías, e incluso no creyente que, a través de su inquietud y deseo de verdad, se encuentran con el Salvador.

               Los pone en camino un signo celeste que presagia algo grande. Para iniciar el sendero hacia Belén, antes tuvieron que moverse de otro modo. El primer movimiento lleva a despegar los ojos de lo cotidiano y práctico para dirigirlos al cielo, algo aparentemente improductivo. Cuando nuestra vida se llena solo de cosas prácticas renunciamos a lo que nos eleva y nos abre posibilidades insospechadas que nos elevan. El segundo movimiento los hace mirar con interés, contemplar, dejándose sorprender por algún hecho o detalle significativo. Esto rompe la pasividad como aquella con la que recibimos muchas imágenes, como sucede a través de las múltiples pantallas de nuestros dispositivos electrónicos, sino que los lleva a un tercer movimiento: reflexionar y hacer preguntas. Así entendieron que el astro luminoso anunciaba el nacimiento de alguien muy grande. Pero no esta todo resuelto. Tenían que viajar para seguir buscando y seguir descubriendo.

               Al llegar a Jerusalén preguntan por el objeto de su búsqueda: el rey de los judíos. Muestran una actitud necesaria para encontrar de verdad: la humildad que hace reconocer sus límites, la propia ignorancia. Aun habiendo dedicado mucho de su vida a la investigación, siempre quedará muchísimo más, inagotable, por descubrir y otros pueden ayudar a ello. Las diferentes experiencias compartidas enriquecen de modo prodigioso.

 

Programación Pastoral 2021-2022